Soñando despierta
colorido otoño
la calma, Barrio parque.
Me despertó un tic tac
noche de insomnio
ya perdí la paz.
Sólo pido dormir
cuando quiero no puedo
si puedo me lo impiden.
Viaje de vuelta
las vacas, compañeras de ruta.
La mirada de ella a través de la reja.
Por la Ricchieri
la vaca y yo,
cruzamos una mirada.
Veredas de Buenos Aires
tapiz destrozado
dueños sin corazón.
Viviendo en la calle
toda su vida en bolsas
en una noche de tormenta.
Lluvia torrencial
la basura de las calles
¿donde irá a parar?
me gusta
ResponderEliminargracias por entrar en mi blog.
ResponderEliminarkarin
lo hermoso del haiku es esa sencilla brevedad
ResponderEliminarconcebtrando el instante
bonito blog!
trébol
Trébol, me alegro que hayas leido cada uno de mis haikus. Los voy subiendo poco a poco, así que espero tus visitas y tus comentarios. gracias una vez más.
EliminarKarin
Admiro la facilidad con la que escribes cosas tan bonitas en tan sólo tres versos.
ResponderEliminarAbrazos.
Rafael. Es muy gratificante para mi que dejes tu impresión sobre estos haikus. Ya que empecé esta modalidad de poesía con el haiku de la vaca. observándolas por primera vez con ojos de haijina, sin saberlo.
EliminarUn abrazo
Maravillosos haikus.
ResponderEliminarun saludo
fus
Gracias Fus, es un placer recibir tu visita. Bienvenido a mi rinconcito, deseo que vuelvas siempre.
EliminarSaludos
TODO REFLEXIÓN. SE NOTA QUE ERES MUY HUMANO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Reltih, es triste ver una ciudad tan bella como la mía tan descuidada, tan llena de basura, tantas personas sobreviviendo en esas calles...
EliminarSe me parte el alma...
gracias por dejar tu opinión